En esta serie de notas ¿Qué hago si…? ya te recomendamos cuál es la mejor manera de reaccionar si un auto viene de frente en la ruta (ver acá), ahora vamos a decirte qué tenés que tener en cuenta si en plena marcha se rompe el vidrio más importante que tiene un auto: el parabrisas.
Puede fallar
El parabrisas está diseñado especialmente para que no se deshaga totalmente (vidrio laminado) si recibe un golpe, pero igualmente se puede astillar. Dependiendo del lugar donde reciba el golpe podés perder la visibilidad y puede volverse muy peligroso, no sólo para tu integridad física sino para cualquiera que esté en nuestro camino.
¿Qué hacer?
En este caso lo que recomendamos es tomarlo con la mayor calma que la circunstancia te permita. Sin prisa, pero sin pausa, levatá suavemente el pie del acelerador, mantené firme el volante en una dirección recta y encendé las balizas para comunicar al resto que estás frente a una emergencia.
Lo segundo que tenés que hacer es comenzar a sacar tu auto al costado del camino (en el que no haya nadie). Una vez que el auto esté completamente detenido, terminá de romper el parabrisas con un golpe seco y llamá al auxilio.
¿Por qué se puede romper parabrisas?
Hay muchas causas, desde un elemento que es despedido por otro vehículo o impulsado por el viento hasta un objeto que te puedan haber lanzado intencionalmente, pasando por diferencias de temperatura, fallas de rigidez del auto (como torsión), un brazo del limpiaparabrisas que no está en su lugar, la propia presión del aire en la fuerza del viento y las vibraciones del motor…todo esto puede hacer que nuestro parabrisas se rompa o comience a agrietarse poniendo en riesgo nuestra vida y la de las demás personas.
¿Te pasó?
No dudes de contarnos si algo de todo lo que mencionamos te pasó, y sobre todo, la forma que tuviste para resolverlo.
